Una de las ventajas de las instalaciones de redes de internet cableadas es que esta se instala y se conecta a través de un cable, por lo que requiere que los dispositivos estén enchufados. Con esto sólo los dispositivos conectados podrán conectarse a la red y, por tanto, nos permitirá limitar el acceso de cualquier dispositivo desde el exterior.

La red inalámbrica aporta más movilidad, una vez instalada, la red wifi permite moverse libremente dentro del radio disponible. A fin de que los trabajadores puedan mover su ordenador desde el escritorio a la sala de reuniones sin tener que enchufar o bien desenchufar un cable de datos.

Otra ventaja de la instalación de red inalámbrica es su flexibilidad, puede adaptar de manera fácil el área de cobertura de la red y escalarla según las necesidades del negocio. En el caso de que des la bienvenida a un nuevo empleado, por poner un ejemplo, podrás conectarlo a la red gracias a una manipulación muy sencilla y rápida.

Los nuevos y potentes accesos permiten que todos aquellos servicios y aplicaciones que dependen de la conexión a Internet, como puede ser la telefonía en la nube, la videoconferencia, compartir y sincronizar ficheros, el acceso remoto a las aplicaciones de la empresa o la emisión y recepción de vídeos en streaming, puedan llevarse a cabo de forma simultánea por todos los empleados de manera rápida y eficaz.